domingo, enero 14, 2007

CON GRACIA


"Eiqui todo o mundo vai o seu, menos eu que vou o meu". Este es un refrán gallego: Aquí todo el mundo va a lo suyo, menos yo que voy a lo mío. Seguramente se podría escribir en otras lenguas y estoy seguro que existe en ellas explícita o implícitamente. Me gustaría que no existiera, me gustaría que no me lo hubieran contado aunque me hizo gracia el oirlo. Por desgracia, existe, es real. Muy real. Pero desde aquí me gustaría proponer otro: Aquí nadie va a lo suyo, cada uno solo piensa en los demás. ¡Cómo aburre el egoismo! ¡Cómo alegra la vida la generosidad!

7 comentarios:

miancaq dijo...

El ser humano fue creado para relacionarse, para vivir en comunidad, en familia, para salir de sí mismo; sólo se realizará como tal en la medida en que se enttregue a los demás, sólo será feliz si busca la felicidad del otro, sólo será libre si busca la libertad de su hermano, si busca su bien

Alberto Portoles dijo...

La verdad es que has redondeado maravillosamente bien lo que solo quedaba incoado en mi comentario. Gracias

Unknown dijo...

Efectivamente, lo ideal es lo que dices, y para ello me parece que los primeros que tenemos que cambiar somos nosotros mismos. Un saludo. Da más paz poder pedir a los demás cuando uno ha ido por delante. Un saludo

caminante dijo...

Caro Alberto: ese es el juego divino del Amor. Juago al que hemos de jugar apostando, como Él, la vida a una sola carta. "Vivo yo, pero no yo...".
Un fortísimo, caminante y tardío abrazo.

Alberto Portoles dijo...

Caminante, sí es el juego divino del Amor, pero hay que convertirlo en juego humano para que el juego Divino no sea en balde. El quiere que le imitemos, creo yo, así que habrá que empezar por los que tenemos muy junto a nosotros. Me recuerda a un personaje al que venero: para ser divinos, hay que ser muy humanos... ¡a ver si a costa de elevarnos a lo divino olvidamos lo humano!

caminante dijo...

Caro Alberto: no era mi intención un misticismo desencarnado.¡Craso error!
Creo recordar que alguien decía que es en el corazón del hombre donde se unen el cielo y la tierra y que no tenemos más que un corazón con el que amamos a Dios y a los hombres. Y que hemos de amar al "próximo". Es muy fácil amar entelequias.
Un fortísimo y agradecido abrazo.

pi1416 dijo...

10 por su ultimo comentario.una vez me quedo muy dentro algo que oi
¿las catedrales se han echo con fe?si pero tambien con geometria
fe y geometria
no pueden ir separadas aunque aveces el de arriba nos pida que hagamos las cosas por fe sin ver geometria pero contando siempre con geometria aunque aveces nuestra geometria no sea la suya me entiende por donde voy ¿no?
se va al blog de su amigo javier creo que le he respondido y ya sabra quien es la anonima que le da tanta rabia.un afectuoso saludo