En este maravilloso mundo en el que estamos viviendo nos acompañan unos personajes que se autocalifican de modernos, progresistas, avanzados y no sé cuantas cosas más que suenan muy bien, pero que a la hora de la verdad son contenidos vacíos e inconsistentes. Por ejemplo son agnósticos, humanistas (?) y tolerantes, pero realmente son ateos (?) y tremendamente intolerantes, de hecho son los representantes de un laicismo que no sólo manifiesta su aversión a todo lo religioso en la esfera que sea, sino que además se muestran violentos e intransigentes con todo aquel que se presente como creyente. Entiéndase que creyente es ser cristiano. Para ellos, todo se puede perdonar (faltaría más, siendo nosotros como somos los "humanistas" que defendemos el hombre y todo lo humano), pero no se puede tolerar que el hombre caiga tan bajo como para tener unas creencias trascendentes.
6 comentarios:
Saludos. Firmo lo dicho y nosotros a ser persistentes en la coherencia.
Fenomenal por lo que apuntas en tu blog. Estamos en ello.
No cabe duda que es cierto, pero no es menos cierto que: en este maravilloso mundo hay personas que están empeñadas en vivir de tal forma que triunfe la Verdad... incluso están dispuestas a obviar los aspectos negativos a costa de sufrir alguna que otra humillación.
Juanluis tu sentido positivo es excelente y así hay que ver las cosas, pero tampoco podemos cerrar los ojos a la realidad, precisamente porque se quiere vviri según la Verdad-verdad hay que actuar y moverse y cada uno desde su sitio avanzar y desenmarcarar las falsas verdades y los inmumerable dogmas en una sociedad que dice que aborrece de los dogmas.
No cabe duda que la Verdad o lo es siempre o no lo es nunca; que es inalienable y no entiende de medias tintas. En eso, como en muchas más cosas estamos de acuerdo...
Mi pensamiento iba en la línea de dar más importancia a lo positivo; pues me parece que en estos días sobran espacios en los que se muestran verdades que el conocerlas sólo parace ayudarnos a caer en el desánimo...
No tenemos porque caer en el desánimo, todo lo contrario hay que luchar para superar esos aspectos negativos que oscurecen la verdad. Lo que si que me parece claro es que por aparecer como personas que enfocan las cosas positivamente no queramos hablar de lo que no funciona o va mal. Lo que habrá que hacer es no desanimarse ante esas situaciones o esas personas, pero dejando las cosas claras habrá que poner todos los medios para dejar clara la verdad.
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