viernes, octubre 10, 2008

PASOS DE CEBRA


Al llegar a casa, leo en El Faro de Vigo, el periódico de Vigo, lógicamente, que al año 200 personas son atropelladas en los pasos de cebra de la ciudad. Puede parecer exagerado, pero soy testigo de que es una noticia auténtica: en el corto recorrido que he hecho para ir de mi trabajo a mi casa he pasado por tres pasos de cebra y en los tres he tenido problemas de supervivencia: un motorista muy joven que me ha esquivado haciendo una graciosa pirueta, una joven secretaria o ejecutiva o lo que fuera, pero que llena de agresividad ni se ha dignado mirar sino que nos ha parado a tres personas en seco y un anciano es un todoterreno que solo miraba hacia adelante aferrado a su mastodóntico volante.
Tenemos que avanzar todavía mucho para adquirir sentido de civismo y de respeto a la persona. Siempre se ha dicho que al montarse en un coche no convertimos en otra persona, pero habría que intentar no dejar de ser persona.